Voluntariado corporativo y emergencias internacionales

Mans Unides - Flickr

Ante tragedias como la sucedida hace unos días en Filipinas por el tifón Haiyan, gran parte de la sociedad se moviliza para socorrer a las personas que padecen dicha situación. Las empresas también tienen un papel importante en esta movilización. Son muchas las que lanzan programas de donaciones entre sus empleados, incluso doblando la compañía el importe aportado por la plantilla. Pero hay algunas que dan un paso más, y deciden que sus profesionales viajen a los destinados afectados para contribuir a su reconstrucción.

Si en tu empresa hay interés en desarrollar un programa de este tipo, tres recomendaciones fundamentales antes de adentrarse en este tipo de proyectos:

  1. Tener un plan elaborado previamente es crítico en este tipo de reacciones. El tiempo es un factor fundamental y no se puede perder en pensar qué vamos a hacer, cómo o con quién.
  2. Este plan debería contemplar tres decisiones fundamentales:
    • Qué perfiles de empleados participarán, su formación y la forma de activarse para participar en el programa.
    • En qué casos, países y ante qué situaciones de emergencia se movilizará la empresa.
    • Quiénes serán los socios: ONG y/o administraciones públicas. Esta decisión deberá ser previa a la emergencia para poder integrar los protocolos de ambas organizaciones
  3. Definir un modelo de gestión de la expectativas de los profesionales interesados en participar. Deben conocer cómo es el modelo de intervención ante una emergencia y estar preparados para la situación que se encontrarán y para su regreso posterior.

Algunos ejemplos de empresas que ya están colaborando con programas de voluntariado corporativo en situaciones de emergencia.

Ericsson y su programa Ericsson Response. La compañía de telecomunicaciones, en colaboración con Naciones Unidas o Cruz Roja, desarrolla un programa de voluntariado corporativo en situaciones de grandes emergencias humanitarias consistente en el despliegue de redes de telefonía y datos que permitan la comunicación de las diferentes agencias y ONG de ayuda humanitaria participantes para facilitar su comunicación y coordinación. Este programa dispone de sus voluntarios formados, de su material específico y de su protocolo interno en Ericsson y en coordinación con el resto de agentes de la cooperación internacional.

Otro caso menos conocido es el que desarrolla DHL, GoHelp. La empresa de paquetería, en coordinación con OCHA -la agencia de Naciones Unidas encargada de las emergencias humanitarias-  prepara a los equipos de los aeropuertos para gestionar el aumento de suministros y de actividad que supone una situación de socorro. También disponen de un programa de formador de formadores para los aeropuertos de zonas de alto riesgo en Asia y América. Y finalmente han trabajado en un programa para embalar de otra forma los productos de la ayuda humanitaria.

Si quieres conocer más sobre cómo pueden colaborar las empresas en estas situaciones, te recomendamos la publicación del Instituto de Innovación Social de ESADE y Escola de Cultura de Pau Empresas y crisis humanitarias: dilemas y retos.

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