La historia de Marta: «Ayudar me hace crecer como persona y ser más consciente de la vida real de todo el mundo»

Con motivo del Día Internacional del Voluntariado, te traemos historias reales de quienes se dan un poquito a los demás a través de su empresa. Marta González Alcalde, empleada de Naturgy, que realizó una actividad de voluntariado junto a la Fundación Secretariado Gitano en Madrid, te cuenta su experiencia.

«Participé en el voluntariado de Fundación Secretariado Gitano en Madrid. Hicimos una sesión de formación en la que nos contaron la historia del pueblo gitano, poniéndonos en situación para que entendiéramos su cultura y pensáramos cómo ayudarles».

 

Hay un programa concreto para mujeres de esta cultura. Invitaron a unas 15 y lo que hicimos fue darles una parte de formación sobre energía y eficiencia energética y explicarles cómo es el contrato. A las que habían traído una factura les atendimos individualmente para hacer un análisis de la potencia instalada y sobre la adecuación de su factura a su realidad.

Estuve sentada con una persona que trajo la factura. Me estuvo contando cómo es su día a día, en qué momento pone la calefacción, etc., e intenté darle alguna pauta: por ejemplo, el sistema de calefacción más adecuado. Luego pasé la información por el canal voluntario, me dieron el informe y se lo envié a las chicas de voluntariado.

Había participantes, como el caso de la que mujer con la que estuve yo, que tenía bastante conocimiento de todo y ya había pedido el bono social y hecho todas las gestiones oportunas; sin embargo, había otras que tenían menos conocimientos sobre el tema.

Sobre todo la capacidad de ahorro surge de bajar el término de potencia de contratación y por beneficiarse del bono social. Además adquirir hábitos de consumo eficientes en el hogar también repercute en el ahorro.

Creo que siempre es bueno ayudar a quien lo necesita y tener la oportunidad de hacerlo dentro de la empresa y sobre un tema como es la energía, es aún más motivador. Teniendo en cuenta que el tema de la energía es difícil de entender,participar en voluntariado me hace crecer como persona y ser más consciente de la vida real de todo el mundo. Te obliga a ti misma a ser mucho más responsable con los consumos.

El voluntariado energético aporta mucho porque todo es muy natural, usas consejos que le darías a un amigo.
Estar allí, todos en el mismo barco, el acercarte a una cultura de la que no tienes prácticamente ningún conicimieno, me aportó. Enriquece como persona, siempre. Y todo lo que sea conocer gente, también.

Aparte del informe, creo que a la mujer que asesoré le aporté confianza para que siga mejorando.

 

Lee más historias de voluntariado, como esta entrevista a Mercedes Cerdán, que impartió un taller de empleabilidad a un grupo de mujeres sobrevivientes a situaciones de violencia de género.

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