Día: 22 de noviembre de 2018

El 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, volverá la marea violeta.

 

El 52% de la población española se considera feminista, según la encuesta elaborada por Belén Barreiro, exdirectora del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El estudio arroja un cifra preocupante: el 63% de las mujeres reconocen haber sido víctimas de acoso o agresiones machistas.

 

El debate público sobre la sentencia judicial del caso de agresión sexual cometido por “La Manada”; el movimiento internacional de solidaridad entre víctimas de acoso #MeToo (o #Cuéntalo), que ha revolucionado las redes sociales de todo el planeta; o el juicio que enfrenta el Gobierno Español por la legalización del sindicato formado por prostitutas «Otras», son algunos de los hitos que han hecho de 2018 un año clave. Año de ideas, denuncias, propuestas y debates en torno al feminismo.

 

Menos denuncias y más condenas

Según datos oficiales, en lo que va de año 43 mujeres han sido asesinadas a manos de sus parejas o exparejas en nuestro país. En total, 971 desde enero de 2003, momento en el que se empezaron a contabilizar.

 

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Aunque el número de denuncias por violencia de género se ha reducido (cerraremos 2018 con un descenso aproximado del 40% respecto al año anterior) el número de condenas se ha incrementado. Este es uno de los principales datos del último informe del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, del Consejo General del Poder Judicial. Entre enero y junio de este año crecieron las sentencias penales por violencia machista: 21.132 frente a 15.770 del mismo período de 2017, de las que el 64,5% fueron condenatorias.

 

Una carrera de obstáculos

La violencia contra las mujeres está presente en los estereotipos, en la educación, en el entorno laboral. A pesar de los avances, hombres y mujeres continúan desempeñando roles diferentes en la sociedad. Las mujeres son las que salen peor paradas en este reparto.

Nunca ha habido una presencia tan amplia de mujeres en el empleo remunerado pero la discriminación, directa o indirecta, que sufren en el mercado laboral sigue siendo un gran condicionante. Menos oportunidades, menos salario, menos promoción y menos poder, esa es la realidad a la que se enfrentan los más de 10 millones de mujeres que actualmente se encuentran en edad de trabajar en España.

 

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Las mujeres siguen teniendo menos recursos económicos. Esto se debe, fundamentalmente, a que acceden a empleos de peor calidad u ocupan la mayor parte de las jornadas parciales. En total, dos millones de asalariadas cobran menos de 864 euros al mes, lo que coloca a 4 de cada 10 mujeres entre el 30% peor pagado de la población española.

Si conjugamos los distintos factores para analizar la llamada “brecha salarial” y hacemos una comparación con los ingresos medios del sexo masculino, llegamos a la conclusión de que las mujeres españolas están trabajando “gratis” desde el sábado 10 de noviembre hasta finales de año. Este panorama hace que la necesidad de aprobar una ley por la igualdad salarial entre ambos sexos sea cada vez más urgente.

 

Empresas que son feministas

Cada vez hay más empresas comprometidas con la lucha contra la violencia de género y promueven  la igualdad dentro y fuera. Lo hacen impulsando políticas de recursos humanos que garanticen la equidad o apoyando proyectos de sensibilización, prevención o apoyo a mujeres sobrevivientes de la violencia.

La presidenta del Banco Santander, Ana Patricia Botín, se posicionó el pasado agosto al declararse “feminista”. Defendió los beneficios empresariales que supondría tener una presencia más equilibrada de mujeres, al tiempo que llamaba a adoptar un cambio individual y personal de las mujeres que luchan por ascender frente al techo de cristal.

Grupo Vips, por su parte, ofrece a sus emplead@s un programa de atención social con el objetivo de ayudarles a superar las dificultades con las que pueden encontrarse durante su etapa en la compañía. Entre ellas, posibles situaciones de violencia o maltrato en sus hogares. En caso de requerir algún tipo de apoyo administrativo, legal o psicológico en este ámbito, las empleadas pueden solicitar vía email este servicio, externo y estrictamente confidencial. En un plazo de 48 horas serán contactadas por un trabajador social especializado que les indicará los pasos a seguir.

El sector energético ha sido tradicionalmente masculino. Para aumentar la presencia femenina en plantilla, Naturgy tiene desde 2015 un Plan de Diversidad. Gracias a él ha logrado que más del 30% de sus profesionales sean mujeres (el 44% de los contratos realizados durante 2017 tienen nombre de mujer). El plan ha llegado también a la dirección: el 24% de las 500 personas de alto rango ejecutivo son mujeres. En mandos intermedios el porcentaje es del 29%.

 

Feminismo y voluntariado corporativo

El voluntariado corporativo también ofrece múltiples oportunidades para incorporar los valores de la igualdad de género. Iberdrola, por ejemplo, ha puesto a disposición de sus voluntari@s la posibilidad de generar un espacio de encuentro con mujeres en situación de vulnerabilidad. El objetivo es compartir historias de grandes mujeres que no dejan indiferente. Con el ánimo de acercarse a la problemática de la violencia contra la mujer y el empoderamiento desde otro ángulo, este espacio compartido da una vuelta de tuerca a los modos más tradicionales de motivación y superación de situaciones difíciles. ¿Cómo? A través de la literatura y las “mujeres faro”. El taller “Mujeres con luz propia”, organizado junto a la Fundación Amigó y la Asociación Candelita, es un espacio para leer o contar historias sobre grandes luchadoras con proyectos brillantes o propuestas innovadoras.

 

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El mensaje de Iberdrola hacia sus voluntari@s es claro: “¿Hay una mujer “faro” que te guía y su pasión, innovación y fortaleza te acompaña cuando tu vida se tuerce? Cuéntalo”. Los ejemplos son muchos. Hay grandes heroínas, como Ana Frank, que en su juventud ya era “una mujer con fuerza interior y un montón de coraje”; como Virginia Wolf, que empujó el movimiento feminista y animó a las mujeres a tener su propio espacio, físico y mental: “No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente”, diría. También mujeres como Clara Campoamor, que luchó y consiguió que las mujeres ejercieran su derecho al voto en 1933. Y Victoria Kent, bajo la filosofía de Concepción Arenal contribuyó a que las cárceles sirviesen para la rehabilitación de las presas y presos.

Estas mujeres son mundialmente conocidas, pero también existen las historias de otras que no tuvieron ese renombre, pero cuyo ejemplo es digno de mención. Tal vez una abuela, una antigua profesora o un personaje literario. La iniciativa pretende sacar a la luz mujeres que luchan, que arriesgan, que se superan y que con su energía contagian. A través de su ejemplo, otras mujeres en situación de vulnerabilidad se empaparán de fuerza y entereza y podrán salir más fácilmente de su complicada situación.

 

El empleo, punto de partida

A principios de este año, Grupo Santalucía puso en marcha un proyecto orientado a la lucha contra la violencia de género, más concretamente, hacia su superación. En colaboración con Fundación Integra, la compañía ha desarrollado “Mirada Segura”, cuyo objetivo era la recuperación emocional, social y profesional de 30 mujeres sobrevivientes de violencia de género de Valencia.

 

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A través de su programa de voluntariado corporativo, varias empleadas y empleados han impartido talleres para mejorar sus habilidades sociales y laborales. Así promueven su empleabilidad e integración en el mercado laboral. La independencia y la autoestima asociadas al empleo son herramientas fundamentales para combatir este tipo de situaciones. Sin duda, el trabajo es la manera más eficaz para que las mujeres puedan salir del círculo de violencia, ya que les permite retomar sus vidas, sentirse autosuficientes y capaces de afrontar nuevos retos personales.

 

Si quieres que tu empresa impulse igualdad de género, involucra a tus profesionales a través de acciones solidarias. En Hazloposible te ayudamos a desarrollar proyectos de voluntariado corporativo e innovación social¡Contáctanos!